La terapia fotodinámica (PDT) es un tratamiento médico dirigido que utiliza luz y un medicamento especializado llamado fotosensibilizador para eliminar células cancerosas, precancerosas y otras células problemáticas. Cuando se activa con la luz, el fotosensibilizador desencadena una reacción química que destruye selectivamente las células anormales y minimiza el daño al tejido sano. Este enfoque hace que la TFD sea una opción versátil para un número creciente de afecciones, desde el cáncer de piel hasta la degeneración macular.
Cómo funciona la terapia fotodinámica
El proceso implica dos pasos clave. Primero, se administra un fotosensibilizador, ya sea por vía tópica, oral o intravenosa, según el área objetivo. Este medicamento se acumula en las células anormales, haciéndolas sensibles a la luz. Después de un período de espera (horas a días), el área se expone a una longitud de onda de luz específica (azul o roja), activando el fotosensibilizador. Esta activación genera una forma de oxígeno que mata selectivamente las células objetivo.
Hay dos tipos principales de TFD: convencional (en clínica), que utiliza luces láser o LED, y TFD con luz diurna (dPDT), que utiliza luz solar natural. La dPDT a menudo implica la aplicación de protector solar para proteger la piel circundante del daño. Si bien es potencialmente menos doloroso, la dPDT se investiga menos que su contraparte convencional.
Usos emergentes y aprobados por la FDA
Inicialmente desarrollada para el tratamiento del cáncer de piel, la PDT ha ampliado sus aplicaciones. La FDA ha aprobado la PDT para:
- Queratosis actínicas: Lesiones cutáneas precancerosas, especialmente en la cara, el cuero cabelludo y los brazos.
- Carcinoma de células basales superficial: Un tipo de cáncer de piel.
- Enfermedad de Bowen: Carcinoma de células escamosas in situ.
- Degeneración macular relacionada con la edad (DMAE): La TFD, a menudo combinada con inyecciones anti-VEGF, puede retardar la progresión de la DMAE húmeda y mejorar la visión en algunos casos.
Más allá de estos usos aprobados, las investigaciones sugieren beneficios potenciales para:
- Acné vulgar: La evidencia emergente respalda la TFD como un tratamiento eficaz para el acné de moderado a grave.
- Psoriasis: Algunos estudios sugieren que la TFD es una opción de tratamiento prometedora y poco utilizada.
- Rosácea y fotoenvejecimiento: Se están explorando aplicaciones no autorizadas para estas afecciones de la piel.
- Usos antimicrobianos y para la curación de heridas: La TFD es prometedora para estimular la respuesta inmunitaria del cuerpo y combatir las infecciones.
Preparación y realización de PDT
Antes del tratamiento, informe a su médico sobre todos los medicamentos y suplementos que toma. Las personas con antecedentes de herpes labial pueden necesitar medicamentos antivirales de antemano. Si usa retinoides, descontinúelos durante una semana antes.
Durante el procedimiento, la mayoría de las sesiones duran entre 15 y 90 minutos. Los pacientes pueden experimentar sensaciones de hormigueo o ardor, que pueden controlarse con ventiladores, bolsas de hielo o pausas breves. Es posible que se requieran varias sesiones.
Recuperación y posibles efectos secundarios
La recuperación suele tardar entre 2 y 6 semanas, según la zona tratada. Los efectos secundarios comunes incluyen enrojecimiento, descamación, formación de costras e hinchazón, que generalmente se resuelven en unos días o semanas. La hiperpigmentación (oscurecimiento de la piel) es posible, especialmente en personas con tonos de piel más oscuros. La protección solar es crucial durante la recuperación.
Las complicaciones raras pero posibles incluyen tos, dificultad para tragar, dolor de estómago o dificultad para respirar, que deben informarse a su médico de inmediato.
Seguimiento a largo plazo
Para los cánceres de piel y las queratosis actínicas, se programan citas de seguimiento aproximadamente cuatro semanas después del tratamiento para evaluar la eficacia. Es posible que se necesiten tratamientos adicionales para obtener resultados óptimos.
Conclusión: La terapia fotodinámica es un tratamiento versátil y específico con aplicaciones en expansión. Si bien en general es seguro y eficaz, comprender el procedimiento, los posibles efectos secundarios y el seguimiento a largo plazo es fundamental para obtener resultados exitosos.
Fuentes editoriales: Cada afirmación relacionada con la salud contenida en este artículo está respaldada por estudios revisados por pares, expertos médicos certificados e instituciones de primer nivel. La lista completa de fuentes está disponible al final del artículo.




























